"El nomadismo digital ha llegado para quedarse en medio de la fuerte irrupción de la digitalización y la transformación del mercado laboral" Yohania de Armas, Directora de Conecta Iberoamérica

1- En un tiempo en el que el talento es el bien más preciado para todas las empresas y corporaciones ¿Cuál es el papel de Conecta Iberoamérica en la región?

Ciertamente en plena economía del conocimiento, el talento se ha convertido en uno de los activos más valorados para el desarrollo económico, la competitividad y la igualdad social. No obstante, aún son muchos los desafíos que tenemos en la región en cuanto al desarrollo, gestión y retención del talento. Justamente Conecta Iberoamérica surge con el propósito de poner en valor el desarrollo de Talento como una actividad clave para el progreso de nuestras sociedades. Teníamos muy claro que el nuevo escenario de desafíos tras la pandemia del Covid19 -que junto a las problemáticas que venimos arrastrando desde hace décadas-, iba a requerir de que repensáramos nuevos esquemas de actuación centradas en el conocimiento, la innovación y el asociacionismo.

2- ¿Cómo se desarrolla la actividad de Conecta Iberoamérica? ¿Encuentran la colaboración pública y privada en su acción?

Conecta es una plataforma integrada por 4 organizaciones que representan a las juventudes de la región: actualmente tenemos unos 1,200 miembros acreditados y contamos con un alcance de unos 70,000 jóvenes líderes, empresarios y profesionales de alta cualificación de 22 países. Nuestra actividad se centra en, por un lado en apoyar el desarrollo profesional de nuestros miembros (mentorias, formación, eventos mensuales, networking de calidad, grupos mastermind, etc.) y por otro, en la captación, gestión y desarrollo de oportunidades profesionales que podamos trabajar desde nuestra red: negocios, proyectos, actividades formativas, proceso de expansión internacional, consultorías, entre otros. Desde luego nuestro enfoque de actuación es muy transversal y hemos participado en actividades como resultado de colaboraciones público-privadas y de hecho, consideramos que es clave para afrontar con éxito varios de los retos que tenemos por delante como la transformación digital, la transición ecológica, la inclusión social, etc.

3- Desde su punto de vista, cómo ve la región iberoamericana en los próximos años ¿Como un espacio de emigración del talento hacía otros territorios (EEUU, Asia o Europa) o como espacios de atracción y retención de perfiles de valor?

Tengo una visión diríamos que optimista en este sentido. Prefiero creer en que seamos capaces de fomentar las oportunidades y condiciones necesarias no solo para la atracción y retención del talento, sino para desarrollarlo de forma efectiva. Históricamente la migración calificada ha sido un flagelo que ha tenido un impacto negativo en nuestros países y que sin dudas sigue siendo un reto que hay que enfrentar desde el ámbito público, privado y multilateral.

Precisamente esta es una de las áreas que abordamos en el Pacto por el talento joven iberoamericano una iniciativa impulsada por Conecta Iberoamérica y la Red Iberoamericana de Jóvenes Líderes. En este movimiento promovemos la necesidad de paliar los efectos de la fuga de cerebros adoptando estrategias encaminadas a promover la movilidad intrarregional por ejemplo.

4-¿Cuáles son a su juicio las claves que un territorio debe aportar para ser atractivo a la atracción de fenómenos como el del nomadismo digital? ¿Cuáles son a su juicio los países que hoy en la región iberoamericana están implementadas acciones de éxito en ese sentido o al menos orientando sus estrategias de manera clara?

El nomadismo digital ha llegado para quedarse en medio de la fuerte irrupción de la digitalización y la transformación del mercado laboral. Las nuevas generaciones ya no conciben un vínculo laboral encerrado en una oficina con un horario rígido, sino que cada vez valoran más la flexibilidad, el trabajo por proyectos y la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar del mundo.

Para que un territorio sea atractivo para este tipo de profesionales hay varios elementos a tener en cuenta en dependencia de la región, pero básicamente serían la calidad y coste de vida, conectividad a internet, la seguridad, las infraestructuras, la fiscalidad y las facilidades migratorias.

Hace poco leí un artículo que indicaba desde que inició la pandemia se estima que el número de nómadas digitales ya supera los 100 millones a nivel global y que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) proyecta que a 2050 habrá 1.000 millones de este tipo de trabajadores. Esto abre un gran escenario de nuevas posibilidades para territorios que ya vemos como han identificado en este fenómeno un nicho para la reactivación de sus economías, sobre todo en el sector turístico que ha sido de los más afectados por la pandemia.

En América Latina hay varios ejemplos que se centran mayormente en aspectos migratorios y fiscales como son Costa Rica, un país a la vanguardia en desarrollo y atracción de talento que hace 2 años aprobó una Ley para atraer trabajadores y prestadores remotos de servicios de carácter internacional que además comprende la exoneración del impuesto de utilidades. Por su parte Panamá creó el Programa Visa de Corta Estancia como Trabajador Remoto para atraer a turistas de estancia extendida y reactivar su economía. Colombia también se ha sumado a este empeño y recientemente ha aprobado una nueva Visa de visitante para nómadas digitales.

Creo que en general en América Latina contamos con mucho potencial para ser una región generadora de talento y con la capacidad de atraerlo, sobre todo en un contexto de crisis global agravada por el conflicto en Ucrania entre otros factores.