Hacía una Responsabilidad Social Empresarial 2.0

En un mundo donde casi no quedan sectores laborales que no hayan sido disrumpidos por la tecnociencia – es decir no sólo por la tecnología misma – es necesario comprender la cuestión desde su base. Esta forma de operar requiere esencialmente de uno o varios cuerpos éticos.
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Cuenta una apócrifa historia que en 1952, hace exactamente 70 años, Henry Ford Jr., hijo del fundador de la marca Ford, y Walther Reuther, entonces presidente del poderoso sindicato Trabajadores Unidos del Automóvil (UAW), caminaban por una de las fábricas donde ya se hacía latente la automatización del trabajo. Al parecer, Walther se dirigió a Henry, preguntándole: “Henry, ¿cómo vas a venderle vehículos a esas máquinas?” A lo que Henry contestó: “Walther, ¿cómo vas a cobrar las cuotas del sindicato a esas máquinas?”


Este jocoso encuentro tuvo lugar apenas cuatro años antes de la Conferencia de Dartmouth, en la que naciera la llamada ‘inteligencia artificial’ y también cuatro años antes de que naciera la sociedad de la información, en este último caso, si uno atiende a los profundos estudios efectuados por Alvin Toffler.


Asimismo, precisamente Henry Ford (padre) fue uno de los arquitectos de la Segunda Revolución Industrial.

Volviendo a Junior y a Reuther, sus respectivas retóricas continúan siendo la base del enfrentamiento que vivimos hoy en día, en cuanto nuestro futuro se refiere. Quiénes sino la empresa privada, la que puede ofrecer solución más rápida y eficiente a semejante dilema.


¿Qué tecnología específica es aquella que los emprendedores y empresas deben observar como el primum movens de la naciente cuarta revolución industrial? Simple, la inteligencia artificial. Llamémosle IA para usar menos espacio. La IA continúa disrumpiendo los cuatro grandes pilares de la tecnociencia de nuestros días, conocidos por sus siglas en inglés como N.B.I.C. o Nanotecnología, Biotecnología, Tecnología de la Información y Ciencias Cognitivas.


En un mundo donde casi no quedan sectores laborales que no hayan sido disrumpidos por la tecnociencia – es decir no sólo por la tecnología misma – es necesario comprender la cuestión desde su base. Esta forma de operar requiere esencialmente de uno o varios cuerpos éticos.


¿Qué es la IA? Pues es esa una polisémica pregunta trillada hasta la saciedad. Es mejor ya plantearse en qué consiste la disciplina filosófica llamada Ética en relación con la IA y si sólo debemos hablar de una. Sabiendo que la ética sufre por las relaciones que tiene hoy en día con el llamado ‘postureo’, el ‘señalamiento de virtudes’, la demagogia y la superficialidad, la ética de una inteligencia artificial es un conjunto de valores, estándares y/o ideales. Dichos valores se agrupan en normas sociales, prescriptivas, punitivas, legales y sí, también en una regularidad estadística absolutamente esencial para el aprendizaje automático o machine learning. Esta última consideración es quizá como mejor se puede estudiar a efectos prácticos.


Existen ya bastantes planteamientos sobre qué principios deben regir la gobernanza de la IA en una organización que se precie de estar trabajando hacia Responsabilidad Social Empresarial 2.0; esta es, la R.S.E. de y en la IA. Refiérase, a que el trabajo inmenso que empezó el Dr. Bernardo Kliksberg – doctorado en ciencias económicas por la Universidad de Buenos Aires – en la década de los 80s cuando propuso la R.S.E. 1.0 que todos conocemos y muchos de cuyos planteamientos llegaron a convertirse en el estándar ISO 26000. Para ser más específico, planteemos los siguientes principios o en una jerga mas techie, estándares para la materialización algorítmica:

1. Principio de No-Maleficiencia

2. Principio de Responsabilidad

3. Principio de Transparencia

4. Principio de Explicabillidad

5. Principio de Justicia y Equidad

6. Principio de Privacidad

7. Principio de Seguridad


En futuros artículos discutiremos estos principios más a fondo. Por ahora, sólo mencionaremos que, en relación con los emprendedores y las empresas, es requisito ya una IA ética para la segmentación de la fuerza de trabajo.

2 Comentarios

1

Muchas gracias, Marcelo

escrito por Frank Escandell 17/feb/23    10:23
2

Excelente artículo

escrito por Marcelo 13/sep/22    18:50

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